Érase una vez en un pueblo lejano donde todos eran animales. Allí vivía Nita que era una oveja. Tenía los ojos grandes, nariz pequeña y boca pequeña. Le gustaba correr y saltar.

Un día Nita jugaba con otros animales que eran sus amigos: la gallina, el caballo, la vaca y el cerdo.

Un buen día de sol claro, Nita dijo:
- ¡Qué aburrido! ¿Qué habrá por ahí fuera? - se preguntaba Nita.

A la noche siguiente, Nita se escapó saltando la valla y empezó a andar.

Atravesó bosques inmensos, pero en un momento Nita se paró y dijo:
- ¡Ooooh, no! ¡Me he perdido!

 

Nita se puso a llorar desconsoladamente.

Al día siguiente Nita buscaba y buscaba pero no encontraba nada. Uno, dos, tres y cuatro días Nita estuvo perdida y al quinto día Nita encontró el camino y llegó a su pueblo y vivió feliz para siempre.
 

 

Helena González
2º Primaria